La necrológica prometida
Generó adhesiones y rechazos y poco le interesó, sobre todo, esto último. Pero defendía a los suyos con uñas y dientes, a sus ideas y sus enfoques con dureza. Con la llegada de mayo se fue Osman, cómo se han ido tantos, como nos iremos todos.
Por Gustavo Zamudio
La redacción de un diario fue para muchos la verdadera escuela de periodismo en la que se fueron formando. Un territorio que se fue poblando de egresados de escuelas de periodismo o de universidades, pero que también mantenía en su staff, a profesionales entrados en años que habían estudiado otras carreras pero que contaban con buen nivel cultural, capacidad de análisis, reflexión y redacción, que le daban un ingrediente especial a cada edición.
Si se le hubiese ocurrido a alguien poner cámaras con micrófonos y filmar las jornadas de trabajo en cualquiera de esas redacciones, seguramente hubiesen tenido un gran material para editar un documental con formato de reality, con buen rating en cualquier plataforma de contenidos.
Por un lado, había reuniones de comités y, por otro, de unidades básicas. En un rincón discusiones gremiales y más allá hablaban como empresarios de finanzas, economía y producción. Ni qué decir cuando el fin de semana llenaba la agenda de contiendas deportivas y eran interminables las discusiones por un penal cobrado o no, por un gol en offside o no.
En un ámbito como ese, en el que había mucha gente en poco espacio, conocí al "Turco" Gabriel Osman. Fue en la vieja redacción (la primera) del desaparecido diario La Mañana de Córdoba en la avenida Vélez Sarsfield, aquel periódico que salía de lunes a viernes fundado por Julio Ramos como una extensión cordobesa de Ámbito Financiero.
Tener al "Turco" como jefe no era una tarea sencilla, por su exigencia profesional, su carácter y su tono de voz fuerte. Yo venía de la sección Deportes y pasaba de crónicas de "la Mole" Moli o de fútbol a cubrir información general, la agenda municipal del Palacio 6 de Julio, y la comidilla política y la rosca que generaba el Concejo Deliberante.
Es el día de hoy, dos décadas después, que varios de los compañeros y compañeras que compartimos aquellos buenos viejos tiempos, cuando nos cruzamos en la calle o en algún evento, recordamos cómo se endurecían nuestros estómagos a las 14 en punto, cuando había que recitarle a Osman el tema que teníamos para desarrollar en la edición del día. Ese era su mayor rigor profesional: tener información, contar cada día con primicias, cubrir cualquier tema, pero siempre con el condimento de aportarle una lectura política.
Estuve a punto de renunciar al trabajo ante tanto rigor. Era difícil soportar la presión. Por suerte no lo hice. Lo poco que aprendí de periodismo se lo debo a él.
Osman era un hombre a quien poco le interesaba quedar bien con el establishment, carente de protocolos, a quien le gustaban los desafíos, las discusiones, los cruces con fundamentos fuertes y volumen alto.
Pasaba de hablar de mitología griega a discutir el fallo de una pelea de boxeo del fin de semana en un abrir y cerrar de ojos.
Generó adhesiones y rechazos y poco le interesó, sobre todo, esto último. Pero defendía a los suyos con uñas y dientes, a sus ideas y sus enfoques con dureza.
Se lo recuerda con su barba espesa y canosa, y el humo constante que generaban los cigarrillos que fumaba, en tiempos en que las redacciones eran una nube de humo y olor a tabaco.
Hizo escuela cubriendo como pocos, por cantidad y calidad, las gestiones municipales. Y fue prácticamente el fundador de poner a la política universitaria en la agenda de los diarios. Quién sabe si ese género seguirá existiendo tras su partida.
Amante de la lectura, del cine y de la música. Recordaba que en sus tiempos de joven estudiante universitario de filosofía había conseguido uno de sus mejores trabajos: ser guardia en una playa de estacionamiento por las noches. Allí, solo y en silencio, aprovechaba para leer hasta la madrugada.
Recordaba las peleas a las piñas que solía protagonizar en picados de fútbol, reconociendo que era muy camorrero.
Pasó por varios medios, entre ellos la vieja LV3, La Voz del Interior, La Mañana y fue fundador del último diario de papel en Córdoba: Alfil. Lo creó con otros muchachos y chicas que provenían de La Mañana, diario que ya no tenía el encanto político de los tiempos de Ramos. Así nació Alfil, medio que intensificó en volumen y agenda, a la política de Córdoba, transformando la rosca, el análisis y la opinión en un lugar destacado.
Con la llegada de mayo se fue Osman, cómo se han ido tantos, como nos iremos todos.
Ah, se preguntarán por qué lo de necrológica prometida: en un momento de reducción de personal en aquella redacción de la avenida Vélez Sársfield, quedé como único periodista a su cargo, entonces, con tono irónico le decía delante de todos que por ese precio de soportarlo yo solo, me había ganado el derecho a escribir su necrológica cuando muriera. Bueno, por esa promesa que le hice es que escribo esta necrológica.
Gracias Turco por lo aprendido. Muchos también lo agradecerán, aunque prefieran no hacerlo público.
Te puede interesar
“La felicidad no la da las cosas, la da los cosos”
La muerte de Pepe Mujica deja un enorme vacío en el terreno de la coherencia política. A los 89 años se fue un dirigente que se supo amoldar a los tiempos de la democracia para intentar cambiar el sistema desde el ejemplo de la austeridad.
Una pieza clave del ajedrez político
El recuerdo a Gabriel Osman, fundador y exdirector de Alfil que falleció el pasado jueves a los 73 años.
Alfil y trece años de un renovado periodismo de análisis
El diario para leer celebra su 13° aniversario inmerso en un contexto que obligó a una fuerte renovación del periodismo político, tanto en Córdoba como en el país. Nuevas plataformas y el compromiso periodístico de siempre.
Edición especial: 12° Aniversario Diario Alfil
Diario Alfil lo invita a participar del 12° aniversario. El diario para leer celebra sus 12 años con la tradicional muestra de las tapas del año. Muestra que, en esta oportunidad, contará con la disertación del reconocido politólogo y analista Mario Riorda.