Municipalización del riego: ¿solución eficiente o maniobra política?

En una decisión que marca un hito en la gestión de servicios públicos de Villa María y desata un debate político, el intendente Eduardo Accastello anunció que el servicio de riego de calles de tierra pasará a manos municipales. Este cambio pone fin a 25 años de gestión por parte de la Cooperativa El Sol, cuyo contrato venció el 5 de octubre.

La medida surge como respuesta a un creciente descontento entre los vecinos, quienes han expresado numerosas quejas sobre la calidad del servicio actual, según encuestas citadas por el intendente.

“Los vecinos estaban muy preocupados porque más de un 81,5% lo calificaban como deficitario al servicio de riego”, explicó Accastello. “Justamente está finalizando después de que tuvo una prórroga de seis años”. El pasado 5 de octubre finalizó el contrato.

Nueva gestión: EMTUPSE y Cooperativa 15 de Mayo

Desde esta semana, el servicio será gestionado por la Empresa Municipal de Transporte Urbano de Pasajeros Sociedad del Estado (EMTUPSE) en conjunto con la Cooperativa de Trabajo 15 de Mayo Lta. Aguas de Villa María (quién ofrece servicios de provisión de agua potable, saneamiento y mantenimiento de desagües pluviales en la ciudad). Esta decisión fue tomada por el gabinete actual sin mediar un llamado a licitación pública como en oportunidades anteriores.

El mandatario justificó la elección: “El Municipio decidió que sea la EMTUPSE con la Cooperativa 15 de Mayo quienes se hagan cargo de la prestación para garantizarles a los vecinos que vamos a seguir prestando un servicio que es esencial”.

La municipalización del servicio se presenta como una solución para mejorar la eficiencia y reducir costos, señaló Accastello. Confirmó que la adquisición de nuevos camiones permitirá al Municipio ofrecer un trabajo más efectivo. “Vamos a tratar de mejorar el riego porque la demanda es alta y la opción de que el Municipio asuma el control permitirá ofrecer una mejor respuesta a los vecinos”, afirmó.

Implicaciones ambientales y operativas

Un aspecto destacado de esta transición es el enfoque en la sostenibilidad ambiental. El nuevo sistema de riego utilizará agua extraída del río Ctalamochita, una medida destinada a preservar las napas subterráneas.

“Se ha incorporado un sistema de bombas a los camiones que permite que se obtenga agua del río para evitar sacar de las napas y es una política ambiental que vamos a llevar adelante”, explicó. Esta decisión cobra especial relevancia en el contexto actual de sequía y cambio climático.

En cuanto a la operatividad, se anticipan cambios en los horarios de servicio, planificando las tareas de riego durante la madrugada para minimizar la interferencia con el tráfico vehicular. Además, se ha hecho un llamado a los centros vecinales y a legisladores locales para conformar un ente de control para auditar y supervisar la calidad de las nuevas prestaciones.

Críticas de la oposición

La decisión de Accastello ha generado una fuerte reacción por parte de la oposición. Natalia González, líder del bloque “Juntos por el Cambio” en el legislativo local, ha emitido duras críticas sobre la gestión anterior de las actividades de la Cooperativa el Sol y las implicaciones de esta nueva medida.

González afirmó: “El intendente no sólo nos dio la razón de lo que hace años venimos advirtiendo desde mi espacio en cuanto a las deficiencias del servicio de riego, sino y principalmente al reclamo que vienen haciendo los vecinos de la ciudad: ausencia total del camión regador”.

La legisladora calificó la gestión anterior como “una desidia” y “una estafa para el vecino”, señalando que “en la gestión del exintendente Gill, no solo no hubo planificación de zonas, de recorridos, mucho menos hubo control, permitiendo que la Cooperativa hiciera lo que quisiera”.

González reveló que “solo en los dos últimos meses, se abonaron más de 80 millones de pesos, que lo pagan cada mes los vecinos en sus tasas municipales”, sugiriendo un posible mal uso de los fondos públicos.

La oposición ve en este cambio una oportunidad para mejorar las prestaciones en las más de 1.600 calles de tierra, pero también exige garantías. “Exigiremos al Intendente Accastello que sea un servicio de calidad, un servicio público eficiente, que el camión regador llegue a cada calle de tierra, que haya una planificación del mismo, que se controle la regularidad de frecuencia”, declaró González.

Desafíos y expectativas

La municipalización del servicio de riego representa tanto oportunidades como desafíos. Por un lado, promete una mayor eficiencia y control sobre la calidad del servicio. Por otro, implica una reorganización significativa y la necesidad de demostrar que la gestión municipal puede superar los problemas que llevaron al descontento con el servicio anterior.

El jefe comunal se muestra optimista: “Lo que estamos buscando es que esto beneficie al ciudadano ya que quiere uno mejor y nosotros queremos en esta ecuación, en un año estar pagando el servicio, capitalizamos al municipio y le damos un servicio permanente”.

Sin embargo, quedan interrogantes sobre el destino de los trabajadores de la Cooperativa El Sol y cómo se gestionará la transición para asegurar la continuidad. Además, la oposición ha prometido mantener un estrecho escrutinio sobre la nueva gestión municipal del servicio.

La municipalización del servicio de riego en Villa María representa un cambio significativo en la gestión de servicios públicos locales. Su éxito o fracaso podría sentar un precedente para futuras decisiones similares en otras áreas de la administración municipal y tendrá sin duda repercusiones en el panorama político. Los próximos meses serán cruciales para evaluar si esta medida logra satisfacer las expectativas de los frentistas, mejorar efectivamente la calidad de vida en las zonas con calles de tierra de la ciudad y resistir el escrutinio político de la oposición.