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Por Alejandro Moreno 

La UCR aprobó ayer iniciar el proceso de sanción de los afiliados radicales que fueron candidatos o colaboraron en las listas de Hacemos Unidos por Córdoba, paquete en el que destaca la figura de Myrian Prunotto, la vicegobernadora electa en la elección del 25 de junio. 

Prunotto acompañó en la fórmula peronista a Martín Llaryora y a lo largo del todo el proceso se anunció a sí misma como la primera vicegobernadora radical, algo que podría frustrarse si es expulsada antes del 10 de diciembre, fecha de su asunción. 

La decisión de ir por los “disidentes” o “traidores” fue tomada ayer en la Casa Radical en una reunión de la que participaron los miembros del Comité Central, presidido por el negrista Marcos Carasso, algunos titulares de comités departamentales, y el presidente del Congreso Provincial, el mestrista Facundo Cortés Olmedo. Fue el primer encuentro partidario después de la elección municipal, en la que Rodrigo de Loredo cayó frente al peronista Daniel Passerini. Si bien todavía faltan las elecciones nacionales, con las PASO como primer estación el 13 de agosto, el juego provincial y capitalino concluyó con dos derrotas, y con ello finalizó también la parte más jugosa del calendario político cordobés. 

El Comité sacará una resolución el lunes por la mañana en la que confirmará el inicio del procedimiento para sancionar a los que trabajaron para el peronismo. Luego, pasado el mediodía, convocarán al quinteto del Tribunal del Conducta para informarle. En días posteriores, con mayor cuidado para evitar traspiés en un proceso que podría llegar hasta los Tribunales Federales si los afectados impugnaran, se redactará la denuncia. La idea es que la acusación parta del propio Comité Central, a diferencia de otras ocasiones en las que un afiliado pueda haber realizado el señalamiento, para darle mayor entidad política a la cuestión. 

Mientras tanto, los comités departamentales tendrán que elevar los nombres de lo que también pasaron la línea en sus ciudades y comunas, por lo que la nómina de denunciados puede resultar bastante extensa. Los más conocidos, de todos modos, serán Prunotto, el intendente de Arroyito Gustavo Benedetti, y el actual legislador Orlando Arduh, que ofició de jefe de campaña de la vicegobernadora electa. 

En el debate del tema, desde el mestrismo recordaron que la UCR cordobesa viene sufriendo una larga historia de traiciones, sugiriendo el recuerdo de lo que sucedió en 2019, cuando Ramón Mestre fue candidato por la lista 3 radical y Mario Negri por la alianza Córdoba Cambia (PRO, Frente Cívico y Coalición Cívica-ARI), división que facilitó el muy holgado triunfo del gobernador Juan Schiaretti. 

Sin embargo, el reproche mestrista no llegó al punto de que se incluya en la lista de réprobos a los radicales que no fueron candidatos por el partido provincial en 2019. 

Fiscales 

El primer tema en la agenda de la reunión en la Casa Radical fue la fiscalización en las PASO del domingo 13. En Juntos por el Cambio competirán por la candidatura presidencial Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, mientras que habrá tres listas de candidatos a diputados nacionales. 

Los radicales resolvieron confirmar la libertad de acción política -es decir que cada cual apoye a quien quiera evitando así que la interna nacional impacte en Córdoba- y establecer que los fiscales cuiden los votos de todas las listas de la alianza –de modo que no sean necesarios dos representantes por mesa, lo cual sería bastante difícil de lograr. 

Análisis 

Sin profundizar, los radicales naturalmente hablaron de los dos traspiés electorales más importantes del año: el del 25 de junio, con Luis Juez, y el del 23 de julio, con Rodrigo de Loredo. Cada sector hará un análisis de lo que ocurrió según su perspectiva, y es muy posible que antes de fin de año haya una convocatoria a un congreso partidario para discutir los errores y las virtudes de lo que sucedió.