Provincial Por: Alejandro Moreno 11 de septiembre de 2023

Apuran pedido de expulsión de Arduh en la UCR

Fuentes radicales aseguran que el intendente de Villa Carlos Paz, Esteban Avilés, renunció a su afiliación

Por Alejandro Moreno 

El avance del peronismo sobre la UCR tuvo un nuevo impulso la semana pasada con el acto en que el legislador Orlando Arduh llevó intendentes radicales para rendir tributo al gobernador electo, Martín Llaryora. La jugada acentuaría la inestabilidad de Arduh en el padrón de afiliados de la UCR. 

El encuentro en el Quórum estuvo cubierta por la etiqueta de una “reunión de trabajo” entre el futuro gobernador y un grupo de intendentes radicales y vecinalistas, pero claramente alimenta la construcción de lo que el mismo Llaryora llama el “partido cordobés”, que parece aspirar a dejar al escenario político sin oposición. 

A la cabeza del entrismo peronista en la UCR está la vicegobernadora electa Myrian Prunotto, sobre quien ya pesa un pedido de desafiliación realizado por el Comité Central al Tribunal de Conducta. 

Prunotto estaba citada para que el miércoles pasado concurra a la Casa Radical a dar su descargo y presentar pruebas en su defensa, pero el que llevó la documentación fue su abogado. Desde el Tribunal de Conducta advirtieron que el acto es “personalísimo”, y que puede realizarse en forma oral o escrita, pero siempre por el acusado. Por ello, la audiencia fue suspendida hasta el miércoles 20. 

Los otros acusados de traicionar a su partido como candidatos del peronismo, hasta ahora, son el intendente reelecto de Arroyito, Gustavo Benedetti, el intendente de Villa Carlos Paz, Esteban Avilés, y el ex candidato a legislador provincial, Andrés Torres. 

Según trascendió de fuentes radicales, Avilés renunció a la afiliación para terminar con el proceso. El carlospacense no confirmó ayer la noticia. 

La nómina de acusados habrá de ampliarse para alcanzar a los que fueron candidatos en listas municipales, así como a los que colaboraron con la campaña del peronismo. De estos últimos, el más notable es Arduh, quien fuera designado jefe de campaña de Prunotto para las elecciones del 25 de junio pasado, en las que Llaryora derrotara a Luis Juez, de Juntos por el Cambio. 

El pastoreo de intendentes que Arduh efectuó hacia el campo de Llaryora tendría rápidas consecuencias en la UCR. 

Esta tarde, el Comité Central sesionará en la Casa Radical presidido por Marcos Carasso. Entre otros asuntos, habrá de discutirse la situación crítica que atraviesa el partido después de las derrotas de Juntos por el Cambio, con Juez y con Rodrigo de Loredo, por la Provincia y la Municipalidad de Córdoba, respectivamente. 

En esa reunión, habría un planteo para apurar la denuncia contra Arduh, por quién también se pediría al Tribunal de Conducta que le inicie el proceso para expulsarlo de las filas de la UCR. En el caso del legislador sería el segundo proceso de sanción; el primero comenzó con a fines del 2021, luego de que impulsara la sanción de la ley que regula el juego on line, a la cual se oponía el radicalismo; de ese trámite resultó absuelto. 

En la UCR el objetivo es quitar del padrón a todos los que se fueron a jugar al terreno peronista antes de fin de año, de manera de evitar que puedan ser protagonistas de las elecciones internas para renovar las autoridades partidarias, que deberían llevarse a cabo en los primeros meses del 2024. 

El temor es que con el apoyo material del peronismo puedan competir dentro del radicalismo para invadirlo con el plan del “partido cordobés” llaryorista. Para ello, Prunotto necesitaría de un núcleo interno propio -que no lo tiene porque los Radicales Auténticos carece de reconocimiento- o asociado. 

En el radicalismo todos parecen estar de acuerdo con quitar del partido a los llamados disidentes o traidores. La única voz que se ha escuchado en contra de ello es la de Juan Gait, que maneja la agrupación interna Córdoba con Todos. Gait ha expresado que juzgar lo sucedido en las elecciones 2023 es algo que debería hacer la próxima conducción partidaria. 

La debilidad en que quedó la UCR por el debilitamiento de los liderazgos de los últimos años (Mario Negri, Oscar Aguad, Ramón Mestre), así como la desaparición de los que se venían anunciando como renovadores (Rodrigo de Loredo) podría facilitar la maniobra del oficialismo.