Por Alejandro Moreno 

El Comité Central de la Unión Cívica Radical resolvió ayer pedir al Tribunal de Conducta la expulsión de Orlando Arduh del padrón de afiliados, luego de que el legislador reuniera, la semana pasada, un grupo de intendentes del partido para un mitin del vicegobernador electo, el peronista Martín Llaryora. 

La jugada de Arduh -a quien se menciona como posible funcionario de Llaryora a partir del 10 de diciembre- apuró una decisión que ya estaba prevista tomarse, porque el legislador fue designado jefe de campaña de la vicegobernadora electa Myrian Prunotto en las elecciones de junio pasado. 

Para el Comité -que sesionó en la Casa Radical para impulsar esta medida, tal como ayer había anticipado Alfil- Arduh cometió una “reincidencia en lo que se consideran inconductas graves”. 

“Orlando Arduh de manera pública participó como ‘Jefe de Campaña’ de la hoy vicegobernadora electa Myrian Prunotto y, por estos días, en el intento de cooptación de los intendentes electos de la Unión Cívica Radical funciona como un operador del electo gobernador de Córdoba, quien a su vez manifestó su decisión de convertirlo en funcionario del futuro gobierno”, señaló el comunicado del Comité Central, que preside Marcos Carasso. 

“La Unión Cívica Radical, que fuera electo como principal partido de la oposición, no se puede permitir condicionar su rol de partido de oposición convalidando procederes y prácticas que contrastan con sus costumbres democráticas”, advirtió el Comité. 

“No llama la atención a la UCR –agregó-, que el Partido Justicialista apele a prácticas que recuerdan a un pasado reciente, en el que la compra y venta de voluntades se hizo corriente”. 

Para los radicales, “la democracia se sostiene con un partido de gobierno, sí, pero también con partidos que, desde la oposición vayan sellando errores y controles imprescindibles para la salud institucional de la Provincia”. 

“Condenamos -enfatizaron- que, con el pretexto de la gobernabilidad, se intente volver a prácticas autoritarias de ‘partido único’, propios de los regímenes fascistas, y pensar que desde las filas de la propia Unión Cívica Radical se pueda ser funcional a ello, es algo que reniega con los principios elementales, volviéndolo moral, ética y políticamente inadmisible”. 

“Es en razón de estas consideraciones que la UCR en su conjunto no puede permitir que quienes se muestren funcionales a todo ello puedan permanecer más tiempo como afiliado del partido”, justificaron. 

Por otro lado, el Comité informó que ayer mismo fueron comunicadas a la Justicia Electoral las suspensiones provisorias de quienes ya tienen un proceso en su contra, como Prunotto, el intendente de Arroyito, Gustavo Benedetti, y el ex candidato a legislador Andrés Torres, además de Arduh. En la UCR quieren evitar que los dirigentes que pasaron a militar en el peronismo puedan competir en las próximas elecciones internas para renovar las autoridades partidarias, que están previstas para el año que viene. 

Además, ratificó que Esteban Avilés presentó su renuncia a la afiliación, por lo que el proceso en su contra es abstracto. 

En el caso de Arduh es el segundo proceso de sanción; el primero comenzó con a fines del 2021, luego de que impulsara la sanción de la ley que regula el juego on line, a la cual se oponía el radicalismo; de ese trámite resultó absuelto.