Suena un nuevo adjunto en MPF y el gobierno recalcula sobre Sesín

Por Bettina Marengo

Martín Llaryora se tomará diez días a inicios de enero antes de comenzar a circular por los festivales del enero cordobés y de preparar la apertura de sesiones legislativas del 1 de febrero, que probablemente se realice en una localidad del sur-sur provincial. 

Falta para eso. Luego de la semana intensa anterior a la que inicia hoy, puede haber más novedades hasta el 31 de diciembre porque el oficialismo quiere despejar el 2026 de decisiones difíciles o ruidosas y asentar las bases para las intenciones reeleccionistas del sanfrancisqueño.

Una de ellas es una posible nueva vacante en la Fiscalía General si, como se presume, la actual fiscal Adjunta Bettina Croppi es propuesta por el Ejecutivo como titular de la Procuración Penitenciaria recientemente creada como contrafuego a la crónica crisis del sistema carcelario provincial. Croppi ingresó en 2022 proveniente de una fiscalía de Instrucción de Violencia Familiar y Género, con vínculos con la exministra de Mujer, Claudia Martinez, hoy secretaria del área, y con la senadora Alejandra Vigo. A meses de estar en condiciones de jubilarse, y sin la presencia del titular del Ministerio Público Fiscal, Juan Manuel Delgado, con quien jugaba en tándem, los observadores ven margen para el cambio mencionado.

 Luego de un Ministerio Público Fiscal que funcionó sin designar titular durante años en el gobierno de Juan Schiaretti, Llaryora usó todas las cartas. La Legislatura acaba de aprobar el pliego del juez de Control Carlos Lezcano para reemplazar a Delgado como jefe de los fiscales provinciales, diez meses después del primer nombramiento llaryorista, el actual Adjunto Alejandro Pérez Moreno, sobre el que inicialmente hubo rumores sobre su pase la mentada Procuración.  

De confirmarse la posible vacante, el Gobernador está pensando en un abogado “de familia de abogados” oriundo “del este provincial” para el reemplazo de Croppi. Una gran posibilidad es el actual y recientemente designado defensor oficial Néstor Gómez, quien fue concejal de San Francisco durante la intendencia de Llaryora en la ciudad cabecera del departamento San Justo. De perfil bajo, la familia de Gómez tiene un reconocido estudio jurídico en San Francisco, y muchos opinan que su arribo al Ministerio de la Defensa fue solo un primer paso para llegar al MPF. Dato de color: en la sede judicial de la patria chica del mandatario provincial, el viernes hubo un “aplauso de repudio” contra la reforma previsional impulsada por el Panal.

Si los cambios se dan, el MPF sumaría un integrante del interior pero las mujeres perderían un lugar, algo que con la nueva agenda política libertaria anticupo y el nombramiento de otro varón como presidente del Tribunal Superior de Justicia, Domingo Sesín, no preocupa especialmente al oficialismo.

-¿Alcanza el tiempo para dos designaciones? Quedan en principio dos sesiones en la Legislatura, el 23 y el 30 de diciembre, para hacer las audiencias públicas, las entrevistas a los candidatos y llamar a sesión para tratar los pliegos.

- Nos sobra.

El Gobierno quedó conforme con la designación de Sesín al frente del TSJ, tras una votación en la que desempató Jesica Valentini, la vocal elegida por Llaryora para el último de los cargos ocupados en el máximo tribunal. Hoy se conocerán los votos de cada miembro del máximo tribunal, que según comentan son bastante duros en los argumentos y responden a una larga y peleada reunión entre los supremos.

Según pudo reconstruir el diario Alfil, la gran novedad de la votación fue que el bloque “mestrista” (porque ingresaron a alto cuerpo durante el  gobierno del exgobernador Ramón Mestre) integrado por Luis Rubio, Aída Tarditti y Sesín, no se abroqueló ni votó en sintonía. Actas en mano, Rubio dijo que los cuatro últimos periodos habían sido para presidentes varones (Angulo, Sebastián Lopez Peña y Sesin) y que correspondía designar a una mujer. Tarditti ya ejerció el rol en varias ocasiones. Le tocaba, en todo caso, a María Marta Cáceres de Bolatti, que tenía el aval del Panal. No hubo acuerdo y la votación quedó en paridad. Por un lado López Peña, Rubio y Cáceres de Bolatti y por otro Sesin, Ángulo y Tarditti. La que definió fue Valentini, pero sobre la candidatura de Sesin porque no hubo acercamiento para achicar entre Tarditti y Cáceres de Bolatti. Nadie cree que Valentini no haya consultado al Panal, y es posible que, vía Angulo, el schiarettismo haya hecho un guiño a favor de Sesín. El administrativista y titular de la Sala Contencioso Administrativo del TSJ ha histórico consultor del gobierno de Juan Schiaretti y ahora el Panal (que inicialmente se jugaba a Cáceres para presidir) lo ve como un enclave valioso cuando se judicialice, como seguramente sucederá, la ley de reforma previsional o el impacto en los haberes de bancarios, lucifuercistas y sobre todo, magistrados y judiciales.