LLA purga alianza local: niegan acuerdos con la UCR y el PJ

Por Gabriel Marclé

Representantes locales de La Libertad Avanza reaparecieron en la escena local para trazar rumbo hacia las elecciones municipales que se avecinan en Río Cuarto. Después de la última campaña en el balotaje, muchas cosas cambiaron y el núcleo libertario autorizado por el presidente Javier Milei se diluyó tras la victoria electoral de noviembre. La ruptura es vendida como una especie de purga interna en la que los espacios menos convocantes salieron disparados hacia otros lugares y en charlas con sectores más amplios. Es por eso que LLA salió a aclarar la forma en la que trabajarán estos meses previos a las urnas riocuartenses.

“Desde La Libertad Avanza Río Cuarto comunicamos a medios y sociedad que no nos encontramos trabajando en conjunto con ninguno de los partidos tradicionales de la ciudad, ni con ninguno de los precandidatos que se divulgan actualmente”, reza el posteo difundido por el partido desde el 31 de marzo pasado. Los responsables de este sector, libertarios que representan la línea del diputado Gabriel Bornoroni en Río Cuarto, salieron a desmentir las versiones que circularon durante enero, muchas de las cuales fueron reportadas por Alfil. ¿No cierran con radicales ni con peronistas? De acuerdo a nuevas informaciones colectadas, eso todavía está por verse.

La información circuló por redes sociales en la cuenta oficial de La Libertad Avanza Río Cuarto, sin tilde azul y que, a excepción de este comunicado de la dirigencia local, solo se dedica a repostear tuits de Javier Milei y las diferentes acciones del Gobierno Nacional, además de posteos de tuiteros libertarios. Pese a las dudas sobre la veracidad de la cuenta, Alfil confirmó que se trata de las redes oficiales del partido en la ciudad. 

Consultados por este diario, referentes de LLA confirmaron un dato desconocido hasta el momento: el Partido Demócrata y el MID se salieron de La Libertad Avanza después del balotaje. De esta manera, los que se quedaron con el sello del oficialismo nacional empezaron a recorrer un camino en solitario que posiblemente los tenga participando de las elecciones, aunque sin la fuerza ni los números que tuvieron para fiscalizar y militar a Javier Milei durante el 2023. La última foto entre todos los componentes de esa estructura libertaria se vio en la noche de la victoria de Milei, en la sede partidario donde todos los militantes posaron juntos.

La disolución del núcleo más grande es quizá lo que termina por cuestionar la contundencia de la versión difundida por LLA esta semana. Aunque puede ser cierto que el sello principal no tiene pensado prestarse a alianzas con el peronismo de Juan Manuel Llamosas o el radicalismo del candidato Gonzalo Parodi, eso no significa que los que trabajaron dentro de este espacio hasta noviembre del año pasado estén siguiendo esa misma regla. De hecho, Alfil pudo confirmar que el MID ya está a punto de cerrar su incorporación a uno de los espacios que competirá y el Partido Demócrata ya estuvo en charlas con más de un aspirante a la intendencia.

Otro de los sectores que trabaja en acuerdos es el Partido Libertario de Mario Lamberghini, ex candidato a intendente y alguien que, aunque quiso pegarse a Milei, terminó expulsado por los armadores de LLA. El dirigente también estaría pronto a confirmar su adhesión a una de las alianzas lideradas por los partidos tradicionales.

Los libertarios de Bornoroni también podrían prescindir del apoyo de los sectores del PRO que trabajaron junto a ellos en la campaña presidencial, los cuales hoy forman parte de alianza Juntos por Río Cuarto y cuyos dirigentes están en charlas para acompañar al radical Gonzalo Parodi en la campaña. Si bien esta cuestión todavía no está definida y los libertarios hablan sobre la posibilidad de mantener la alianza, es probable que carezcan del poder de negociación con el que cuenta el Juntos por el Cambio que se configura alrededor de Parodi.

Las “falsas” versiones a las que aluden los libertarios de LLA podrían enfrentarse al paso del tiempo y al vértigo de las negociaciones previa a la elección local. De no crecer en soledad y si las órdenes que bajen “de arriba” comandan otra maniobra, los que hoy se alejan de los partidos tradicionales podrían terminar jugando a favor de otro candidato más movilizador. Esta posibilidad también es negada y, yendo a por más, hablan de conseguir un competidor propio. Incluso, hablan de un frente más amplio. “Hay política más allá de los peronistas y radicales”, afirman. Futuro aun incierto para el mileismo central.