PJ-RC, entre el clamor a De Rivas y la proyección de Llamosas

Por Gabriel Marclé

“No es un tema que esté en agenda”, respondía un dirigente derivista consultado por Alfil sobre la situación del Partido Justicialista de Río Cuarto y los rumoreados cambios en su plana dirigencial. Aun así, hay voces del peronismo que alientan -de a poco y cada vez con más volumen- la necesidad de iniciar un debate por los nombres, los roles y los objetivos del partido en un momento particular. Primero, para aclarar un rumbo en tiempos donde ya no se habla de PJ, sino de Partido Cordobés. Segundo, por la diferencia de estilos entre el actual presidente -Juan Manuel Llamosas- y el del intendente Guillermo De Rivas, ambos con banca propia para sentarse en la silla principal del PJ. En ese escenario, ¿es posible que se vengan cambios en la estructura? La respuesta varía de acuerdo al lugar donde cae la pregunta.

Podría decirse que el rasgo más tradicional del peronismo riocuartense en la actualidad tiene que ver con el empuje de las filas sindicalistas que la integran. De hecho, la CGT y Las 62 Organizaciones son las únicas que hablan de “hacer peronismo” en tiempos donde la dirigencia política sigue los comandos de la amplitud y absorción de espacios foráneos. Lo hicieron ver durante la campaña y también en los primeros días de la era De Rivas, copando espacios y ganándose un lugar entre la primera línea hoplítica de la gestión. Mientras empieza a “reorganizar” el frente sindical, algunas voces vienen pidiendo a De Rivas para la presidencia del partido.

Uno de los que planteó la cuestión fue el triunviro de la CGT, Julio Chávez, confirmando la posibilidad de que el brazo sindical del PJ debata la renovación de la presidencia, apoyando la promoción al cargo del intendente De Rivas. Desde Las 62-O también levantaron la voz y plantearon que “el que Gobierna, conduce”. Así fue como empezó a circular un tema que, aunque ganan lugar en la agenda más partidaria, todavía no se imponen entre los temas centrales de la dirigencia. Principalmente, porque De Rivas todavía mantiene el perfil bajo en términos de roscas.

En contra de la agenda sindical que pide acelerar procesos partidarios, la mayoría de los dirigentes políticos del derivismo coinciden en que no es momento de iniciar un debate de este tipo. “No hay razón para asomar la cabeza cuando los tiros pasan tan cerca”, reflexionaba un hombre cercano al intendente para referirse al delicado momento social, asegurando que las prioridades de los vecinos marcan el rumbo y se alejan del “chiquitaje”. En ese sentido, se sostiene que el partido ya tiene un líder en Juan Manuel Llamosas.

El ex intendente riocuartense dejó el despacho municipal del Mójica y a las pocas semanas ya estaba asumiendo al frente de la Asesoría del Gobierno de Córdoba en los departamentos del sur, un cargo que demostró la importancia que tendría Llamosas en los planes más próximos del Partido Cordobés. Su exposición como referente regional del Panal permitió que surgieran versiones sobre Llamosas como un candidato potable para las elecciones de medio término en 2025. Entonces, si ese es el plan, ¿por qué sacarle al riocuartense la presidencia del PJ?

“Cada uno se tiene que ocupar de lo suyo. Llamosas armador y De Rivas gestionando la ciudad”, opinó un dirigente peronista respecto a esta disyuntiva por el liderazgo del PJ, algo con lo que coincidía un referente derivista consultado por Alfil. En definitiva, las voces sindicales parecen empujar hacia una situación que la política profesional busca evitar. De hecho, por esta situación, hay quienes le aconsejan al intendente no llevar al extremo la inclusión de las centrales y organizaciones obreras en su agenda de gestión.

“El sindicalismo no está leyendo bien el clima de los tiempos que se viven hoy. ¿Vio “¿El Encargado”, la serie de Francella? Me parece que queda en claro que el sindicalismo tira para atrás”, comentaba otro hombre del oficialismo, cortando en seco la cuestión de la presidencia del PJ. Queda la sensación de que el partido permanecerá dirigido por Llamosas, con De Rivas como lógico heredero del cargo -cuando el momento sea oportuno- y sin apurarse, en el contexto de un país que concentra las problemáticas en el ámbito del Gobierno Nacional y un PJ que se encuentra atravesando un reperfilamiento. “Nadie se mata por presidir el partido, ni acá, ni en Córdoba, ni en el país”, concluyó una voz experimenta del propio PJ riocuartense.