Río Cuarto Por: Gabriel Marclé25 de septiembre de 2024

De Rivas y el “tremendo desafío” de gestionar sin excusarse en la crisis

El intendente reconoce que la situación crítica de la economía es un condicionante para la gestión, pero pidió “no esperar tanto de lo que pueda hacer otro”. Claro mensaje hacia adentro, en medio de la preparación del Presupuesto 2025.

Guillermo De Rivas

Por Gabriel Marclé

La agenda Guillermo De Rivas está completa, sin ningún espacio disponible y en muchos casos planificada con días de anticipación, ocupada en las relaciones entre el Municipio y cada una de las instituciones que conviven allí. En esa línea, el intendente participó ayer de una reunión con el Colegio de Escribanos de Córdoba en la que dejó algunas frases que explican el momento en el que se encuentra la ejecución de su plan de gestión.

“Tenemos un tremendo desafío. Son tiempos complejos, pero también tenemos la oportunidad de ponerle más compromiso y más cabeza”, dijo De Rivas de frente a los escribanos que, con la presencia del Colegio Provincial, ayer inauguraron un nuevo programa que aporta a la accesibilidad de los documentos notariales: los vecinos podrán elegir entre el soporte de papel y las fojas digitales, acción complementaria al desarrollo de la actividad y la facilitación de sus servicios. El jefe municipal de la capital alterna eligió esta oportunidad para hablar de gestionar desde adentro y no culpar a las condiciones del afuera, haciéndose cargo de encabezar una etapa de renovación para el Palacio de Mójica.

Días complejos los que afronta la Municipalidad que hace menos de tres meses renovó autoridades y se abrió paso a la era De Rivas. Desde el día uno de la gestión, quedó la idea de que el nuevo intendente se enfocó en el trabajo duro para producir un quiebre en la época que definió a los ocho años de Juan Manuel Llamosas y la suya, aunque las condiciones del escenario actual todavía no se lo permiten. Al menos no con el grado de impronta propia que el jefe municipal esperaría tener a esta altura del año.

Si bien De Rivas es quien comanda cada acción del Gobierno y protagoniza todas sus actividades, el stress diario y su actitud workaholic todavía no le permitieron lucir el traje por fuera de la agenda más dura. Para decirlo de otra forma, todavía no lo ha llegado a disfrutar -si es que existe algo así. En la propia Municipalidad reconocen que no queda tiempo para nimiedades y que cualquier atisbo de “pérdida de tiempo” queda suprimido por pedido expreso del intendente, quien le impone a su equipo un ritmo más que intenso en un contexto demandante.

“En estos tiempos que son muy difíciles, le propongo a mi equipo que no esperemos tanto de lo que pueda hacer otro”, dijo ayer De Rivas, reversionando el típico reto maternal del “no me importa lo que haga el resto” al estudiante llegaba a la casa con notas bajas, excusándose en que el resto había tenido la misma suerte. De alguna manera, el intendente bajó línea sobre cómo debería ser el trabajo diario en su Municipalidad: hacer lo mejor posible sin pretextos.

En ese sentido, el intendente insistió: “Muchas veces perdemos tiempo viendo qué hacen los otros, el Gobierno Nacional y el Gobierno Provincial, cuando tenemos tanto para mejorar en nuestra propia casa”. Otro mensaje vertical del líder del Mójica, comandando a sus funcionarios para que avancen en lo que se debe hacer dentro de la ciudad y no tanto en lo que no se puede. Ejemplo de esto se vio en materia obra pública: como Nación no manda fondos, De Rivas ya piensa en herramientas para que los privados sean parte de las inversiones. También en el Transporte, donde -anticipan- se piensa en un sistema eficiente que no pierda tiempo en el reclamo por subsidios. Además, el problema de pobreza e inseguridad ya depende casi exclusivamente del Municipio, la primera puerta en la que toca la crisis.

Más allá de estos mensajes más concisos y desperdigados entre actividades, el factor definitorio de esta postura se verá cuando De Rivas presente el Presupuesto 2025 -el cual llegará al Concejo Deliberante el 31 de octubre, de acuerdo a lo que establece la Carta Orgánica. Es probable que algunas partidas se vean reducidas con respecto a las que se elaboraron en el último cálculo de la era Llamosas, razón que explicaría el tenor de los mensajes de estos días. En otras palabras, prepara a sus tropas para lo que viene.

No es el extremo del “lo atamos con alambre”, porque las cuentas municipales -afirman desde el Gobierno- siguen ordenadas, pese a los días de déficit primario. Aunque los números fueran rojos por un tiempo más, De Rivas sostiene ante sus seguidores y funcionarios que se hará todo para cumplir el plan de Gobierno con el que se comprometió en campaña, pero que eso dependerá de un fuerte compromiso de todo el equipo. “Para hacer mejor tenemos que ser mejores nosotros”, reza el mantra que De Rivas vociferó ayer entre los suyos.

Te puede interesar

Uber: la chance de De Rivas para “despegarse” de la prohibición

Primero Río Cuarto logró juntar más de 900 firmas y presentó una consulta popular para avanzar en la regulación de servicios brindados a través de plataformas. Las primeras conversaciones para una regulación conjunta con otros municipios y el “archivo” de las promesas de campaña de De Rivas.