Machado entra al casting de Caputo, que ve en 5 bancas el piso libertario
Según los números en que confía el estratega político de Milei, el sello LLA mide en Córdoba entre 45 y 50 puntos, independientemente de los candidatos, cuyo casting continúa. Festejan, además, que en sus últimas mediciones el oficialismo nacional se impondría incluso a una boleta liderada por Schiaretti.
Por Felipe Osman
Casi como un síntoma del gran momento que atraviesa de cara al electorado, y de la ausencia de una oposición capaz de plantarle bandera en el debate público, La Libertad Avanza distrae en luchas intestinas, que ahora vuelven a elegir a Victoria Villarruel como villana, y hasta empujan a elucubraciones del calibre de llevar a Karina al Senado -en el 2025- para ponerla después en la línea sucesoria, como presidenta provisional de la Cámara Alta.
En cualquier caso, no es más que otro momento en el fluir de conciencia libertario, que mantiene un crepitar continuo en las redes sociales, una especie de calistenia infinita para que las huestes digitales se mantengan siempre alerta.
Lo importante, en realidad, es el contexto: el gran momento que La Libertad Avanza atraviesa de cara al electorado. Y, particularmente en Córdoba.
Las mediciones que desde Buenos Aires centraliza Santiago Caputo le dicen que, en Córdoba, el sello del oficialismo mide, independientemente de la lista, entre 45 y 50 puntos. Un número formidable que ubica el piso de las pretensiones libertarias en cinco bancas, y que les permite imaginar un sprint final que los lleve a la sexta banca, igualando la performance de Juntos por el Cambio en 2021.
En ese marco, resulta sumamente razonable la intención de los puros de reservar para sí la lista. Si lo que mide es la marca, ¿por qué buscar por fuera del espectro libertario candidatos que, incluso, podrían desvirtuarla?
Esa es, en efecto, la lectura que comparten los operadores del asesor estrella, y es por eso que, de momento, los libertarios se concentran en medir sólo a candidatos puros o ‘outsiders’ que lleguen sin historial político. Con una única excepción.
En las mediciones que encargan aparecen Agustín Laje, quizá la principal espada de la ‘Batalla Cultural’ que propone La Libertad Avanza; Gonzalo Roca, la mano derecha de Gabriel Bornoroni en la construcción territorial del partido; Verónica Sikora, la líder de la agrupación ‘La Libertad Primero’ que construye -de momento- por fuera de la estructura partidaria, pero con la venia de Javier Milei; y Andrés Fassi, el presidente de Talleres y uno de los principales impulsores de las Sociedades Anónimas Deportivas en el fútbol argentino.
La excepción a la regla no es otra que Laura Rodríguez Machado, actual diputada nacional por el PRO, y máxima referente de Patricia Bullrich en Córdoba.
La inclusión de Machado entre las potenciales candidatas de Milei en Córdoba es esperable. La diputada siempre ha votado ajustándose al criterio del oficialismo y ha demostrado destreza en la defensa de las posiciones que asume el Gobierno Nacional. Además, su participación en la lista honraría el acuerdo del presidente con Bullrich, que cobra más valor entre más se tensa la relación con Macri.
Roca y Sikora asoman como números puestos. En ellos descansan las mayores responsabilidades de construcción territorial, con el primero moviéndose fundamentalmente en el interior, y la libertaria trajinando las seccionales de Córdoba con regularidad. Sin ir más lejos, el armador de Bornoroni, junto al propio diputado, recorrieron en la última semana por Río Cuarto y Punilla, mientras que Sikora, que viene de recorrer las seccionales 4ta, 5ta y 10ma, tiene agenda para pisar ahora en la 8va, 11ra y 13ra.
Laje y Fassi son dos grandes sueños libertarios, pero resultan hasta ahora más esquivos. Laje está dedicado, fundamentalmente, a su rol de conferencista internacional y de promotor de la ‘Batalla Cultural’ de la derecha. Y Fassi atraviesa un gran momento en Talleres, además de ser un empresario exitoso y consolidado.
Aún así, ninguno le ha cerrado la puerta a Caputo, que, de lo contrario, no insistiría en medirlos. Pero es cierto que, aún si eligieran no se candidatos, ambos pueden prestar servicios a la causa libertaria. Laje, funcionando como un líder intelectual para las huestes libertarias, delineando el relato al que se ciñe La Libertad Avanza. Un rol que desempeña desde el inicio de la aventura y que ahora profundizará desde la Fundación Faro.
Fassi, por su parte, como uno de los principales impulsores de la SAD. Quizá, como la punta de lanza de un grupo de dirigentes deportivos que empiezan a consolidarse en una posición afín al Gobierno Nacional, en la que también se encuentran Sebastián Verón (Estudiantes) y, desde hace horas, Diego Milito (Racing), con el mismísimo Jorge Britos (River) orbitando.
Los escenarios
Caputo ve, en la foto de hoy, dos escenarios. Uno, sin Juan Schiaretti, y otro, con el exgobernador jugando.
En el primero, la victoria de LLA sería -confían- aplastante. El oficialismo oscilaría entre los 48 y los 52 puntos, mientras que una alianza entre la UCR y el PRO que lleve a Rodrigo De Loredo en la cima de la boleta se rondaría los 20 puntos, mientras el oficialismo provincial y Unión por la Patria se disputarían el tercer puesto.
En el segundo, Schiaretti haría variar mucho la ecuación, pero aún así la boleta libertaria se impondría, dejando al oficialismo provincial en el segundo lugar, siendo esta la gran novedad de las últimas mediciones libertarias.