El Suoem, entre el bisturí y la pared
Más allá de las hostilidades tácita o expresamente consensuadas, el conflicto municipal aglomera muchos otros capítulos, que exceden por largo la cuestión paritaria. Y en ese quirófano, el municipio cuenta con un amplio instrumental.
Por Felipe Osman
El Suoem realizó quince cortes, en distintos puntos de la ciudad, con la intención de llevar el conflicto con el Palacio 6 de Julio a una suerte de guerra de guerrillas, maximizando su poder de fuego, que no es otro que perturbar, cuanto sea posible, el día a día de los vecinos, para que sean éstos los que reclamen al intendente un acuerdo de paz con Daniele.
Es, debe decirse, un reloj que corre lento. Todos saben, a uno y otro lado del mostrador, que en los conflictos con el sindicato el contribuyente suele pararse, primero, del lado del municipio, y recién después de agotada su resistencia, el ciudadano se vuelve para reclamar una solución al Palacio Municipal. La cuestión, como siempre, es saber en favor de quién corren las agujas.
Sin PASO, faltan más de cinco meses para las elecciones. Y apenas un mes y medio para que quede determinada la base sobre la cual se calcularán los aguinaldos.
Passerini viene de un arranque de gestión escasamente satisfactorio para los vecinos. Acaba de dar un sacudón a su gabinete, con varios cambios y, más importante aún, conserva las renuncias del resto de sus funcionarios, con la tinta todavía fresca, sobre el escritorio. Lanzó un intensivo plan de bacheo y afinó -después de algunas turbulencias que sí existieron- su relación con El Panal. Estará parado junto al gobernador en los cortes de cinta que haya previo a octubre, sancionó Ficha Limpia casi en absoluta sincronía con las críticas de Llaryora a la caída del proyecto en el Senado. Su gestión está en fase de reconfiguración. Y un conflicto con el Suoem es viento de cola para su relanzamiento.
Daniele, por su lado, viene de revalidarse al frente del sindicato con un amplio respaldo (84 por ciento de los votos), pero con una modesta participación. Tiene en el retrovisor la gestión de Llaryora, que cercenó la jornada municipal y pasó al “negro” varios conceptos en los recibos de sueldo, alivianando no sólo la carga de las contribuciones, sino disminuyendo también el aporte de cada afiliado al sindicato. Por delante, en tanto, no tiene a un intendente, sino a un intendente y un gobernador. El segundo, en conflicto con los estatales provinciales, con los que aplica mano de hierro al punto de descuadrar a las conducciones gremiales que suelen rendirle pleitesía ante al fenómeno de los auto-convocados.
Quienes trajinan las redes del sindicato y sus dirigentes gremiales, apuntan el descontento que existe en múltiples reparticiones por el reparto que delegados e integrantes de la conducción hacen de las becas, primer escalón en el “cursus honorum” hacia la planta permanente de hijos y allegados de los empleados municipales.
Esa es una de las variables que controla el Ejecutivo en la negociación subterránea con el gremio. Pero no la única.
La asignación de “horas módulo” –horas extra- y los descuentos por jornadas u horas no trabajadas es un punto de presión que la Provincia utiliza desde antaño y al que también apeló la Municipalidad en el último conflicto con el Suoem. En una reciente nota con Canal 12, el intendente avisó que habrá descuentos.
Si las asambleas y quites de colaboración se extienden, los descuentos alcanzarán para pagar buena parte de los aguinaldos. El propio conflicto financiará la paz.
Los sumarios administrativos son, ya desde la era mestrista, otra herramienta en el instrumental de un Passerini que rechazó la motosierra, pero habló de bisturí.
La metáfora, que no se adivina casual, indica que el Ejecutivo intentará evitar los movimientos toscos, y operará con precisión en el conflicto, tocando los puntos sensibles del gremio para llegar, cuando los juzgue oportuno, a un acuerdo que no lastre las expectativas de la gestión, que aún tiene mucho por demostrar para inclinar hacía sí la balanza.
Te puede interesar
Con polémica y tensión se aprobó Uber en el Concejo
La ordenanza que se discutió desde el mediodía y se aprobó con amplía mayoría, los votos fueron: 28 votos a favor, 2 en contra y 1 abstensión. A pesar de ello, desde el municipio establecerán limitaciones.
Tensión dentro y fuera del Concejo Deliberante por el proyecto de ordenanza Uber
Mientras el oficialismo se encuentra dividido ante la modificación del artículo 9 que limita el cupo de choferes de la aplicación de transportes, miembros del Sindicato de Peones de Taxis se concentraron afuera del Concejo Deliberante.
Córdoba huele a descontrol
El olor nauseabundo y los controles de tránsito que enojan a los conductores son parte de la misma incapacidad pública para poner orden
Con obras, Llaryora busca “renovar votos” con los vecinos
El gobernador, junto al intendente Daniel Passerini, anunció otra importante obra para la capital y habló de “darle un empujón” a la ciudad. En la previa de la campaña, el peronismo busca renovar votos con los vecinos.
El Suoem acordó con Passerini y aceptaron su propuesta
Tras la oferta del Ejecutivo, la cual está compuesta de cuatro cuotas en los meses de julio, septiembre, noviembre y diciembre, el sindicato aceptó. La propuesta fue aprobada de forma unánime con 230 votos a favor.
Passerini ofertó y avanza hacia un acuerdo con el Suoem
El sindicato comunicó la propuesta del Ejecutivo a sus representados y se encamina el acuerdo. La oferta se compone de un 13,5 por ciento de recomposición hasta fines de diciembre y totalizará un 22,5 por ciento para el 2025.