La mesa CGT-Gobierno Nacional promete tensionar al gremialismo local
La Secretaría de Trabajo de la nación ya avanza en la conformación de una mesa tripartita para que empresas, sindicatos y Gobierno perfilen la reglamentación de la Reforma Laboral. La iniciativa, y la receptividad de parte de la CGT Nacional, pone a prueba el equilibrio del sindicalismo cordobés.
Por Felipe Osman
Durante las últimas semanas, la Secretaría de Trabajo de la nación -que formalmente funciona bajo la órbita de Capital Humano, pero en los hechos depende de Economía- viene avanzando en la conformación de una mesa de diálogo con representantes de las principales cámaras empresarias y conducciones sindicales para discutir la reglamentación de la Reforma Laboral, que el Gobierno sancionó como uno de los capítulos principales de la Ley Bases.
En ese marco, el secretario de Trabajo de la Nación, Julio Cordero, ya mantuvo reuniones con la CGT y con cámaras empresariales de manera individual, pero el próximo paso será reunir a todos los actores en una misma mesa.
La posición de la CGT en torno a la convocatoria de Trabajo es, como casi todos los posicionamientos de la central, dispar. El sector más dialoguista de la confederación está dispuesto a sentarse con el Gobierno a negociar la reglamentación que dé plena operatividad a todos los artículos de la reforma, mientras que el ala más dura de la organización, encarnada en Pablo Moyano, no está dispuesta a formar parte de la convocatoria.
El sector empresario enumeró una serie de puntos que considera prioritarios al momento de avanzar en la implementación de la “modernización laboral”. Entre ellos, los que más tensión prometen generar con el gremialismo son la implementación del Fondo de Cese Laboral, la declaración de nuevos servicios como esenciales y la actualización de créditos laborales.
En resumidas cuentas, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios destacó que la implementación vía convenios colectivos del Fondo de Cese Laboral “no tiene el consenso de todo el arco empresario", pidió revisar el artículo de la reforma que establece los parámetros para la actualización de los créditos que surjan de relaciones laborales, y reclamó la declaración del transporte y la educación como “servicios esenciales”, limitando la capacidad de protesta de los gremios y garantizando una prestación mínima del 75 por ciento de tales servicios incluso en el marco de un conflicto gremial.
Mientras Moyano ha salido a cuestionar con dureza cualquier posición que no sea el rechazo absoluto a la Reforma Laboral, los “gordos” de la CGT, representados en el triunvirato de la central nacional por Héctor Daer y Carlos Acuña, no cortan las vías de diálogo con el Gobierno Nacional, y siguen con atención los pasos de la Superintendencia de Servicios de la Salud, punto neurálgico para el gremialismo, ya que es el organismo que supervisa y controla la utilización de los fondos transferidos a las obras sociales, corazón financiero de los sindicatos.
Este posicionamiento dispar de la CGT Nacional también tiene efectos en Córdoba. A nivel local, conviven dos CGT, la “CGT Córdoba”, no alineada con la central nacional, y la “CGT Regional”, cuya nueva conducción surgió tras el extenso proceso de “normalización” encarado por la CGT Nacional en cada provincia.
Desde principios de año, las dos centrales cordobesas habían empezado a acercarse, conformando la “Mesa de Unidad en la Acción”, e incluso venían participando de movilizaciones conjuntas durante las jornadas de paro organizadas en rechazo a la Ley Bases y el DNU 70, que Javier Milei firmó a días de asumir la Presidencia y que contiene un capítulo laboral que quedó trabado en la Justicia por una cautelar de la CGT.
Ahora bien, el posicionamiento que cada sector de la central nacional asuma al momento de negociar la reglamentación de la Reforma Laboral de seguro traerá consecuencias en el sindicalismo cordobés, y habrá que ver hasta qué punto la CGT Córdoba acompañará los lineamientos que baje la CGT Nacional y, por ende, en qué medida su accionar se distancie de la hoja de ruta de la CGT Regional.
Te puede interesar
Llaryora viajó a Londres y celebró el respaldo internacional a la solidez financiera de Córdoba
El gobernador abrió su gira para atraer inversiones y financiamiento productivo en Reino Unido, allí inversores y bonistas británicos destacaron la estabilidad de Córdoba y su diferencial frente a los títulos nacionales.
El Gobierno Nacional anunció retenciones 0 para todos los granos hasta finales de octubre
Así lo anunció el vocero presidencial, Manuel Adorni. La medida busca aumentar la oferta de dólares y genera festejo entre el sector agropecuario y críticas desde el peronismo cordobés, que reclama una eliminación definitiva.
Schiaretti vs Natalia y un win- win de carambola
Compiten porque se disputan parte del voto peronista, pero tienen objetivos distintos. La diputada va por su reelección (y una banca más) y el tres veces gobernador de Córdoba busca quebrar al Milei del 74%. Ambos peronismos festejarán el 26 de octubre.
Schiaretti se sube al ring de Milei, pero no habrá virulencia en los cruces
El exgobernador tomó nota de los cálculos del Presidente, que necesita una buena elección en Córdoba y en los distritos amigables para evitar la derrota el 260. Juez, que se prometió estar al margen en la campaña, convocó a la tropa de Capital y a los candidatos violetas. Los jubilados ya dieron la vuelta, o eso parece. ¿La juventud? Malena, lo bien que le vino al cordobesismo.
Milei conoció los límites del ‘karinismo’
El presidente asistió a un lanzamiento de campaña desinflado, de magra concurrencia. Y las ausencias también estuvieron arriba del escenario. No fue Laje, ni la militancia de Sikora. No hubo radicales ‘con peluca’, ni participó el Frente Cívico. Como la lista, el acto reflejó el paroxismo de la pureza: la soledad.
En la Ciudad, el deloredismo manda a votar a Elorrio
El deloredismo sigue enfrentado a Mestre. Algunos mandan a votar a García Elorrio en la capital y a la Libertad Avanza, en el interior. García Elorrio niega tajantemente que se trate de un pedido de Encuentro Vecinal y defiende los votos genuinos que el espacio siempre tuvo.