Un giro en la estrategia
Desde el pedestal de celebridad en que se encuentra hoy, Selena Gomez ha resuelto producir la continuidad de “Los hechiceros de Waverly Place” a instancias de una propuesta de Disney, que también la ha invitado a actuar en esta extensión de la serie que la llevó a la fama en su adolescencia.
J.C. Maraddón
El éxito de los libros y las películas de la saga de Harry Potter, allá por los comienzos del presente siglo, desató un furor por la magia que exacerbó las fantasías de niños y adolescentes acerca de esos poderes especiales de los que, según la ficción, estaba dotada cierta clase particular de individuos. Ese interés por las artes ocultas que se disparó a partir de la imaginación de J.K. Rowling, se puso de manifiesto en otros productos vinculados al tema que, bajo diferentes formatos, buscaron captar la atención de esa camada de consumidores que venía predispuesta a sumergirse en los prodigios de los magos.
Por supuesto, hay que mencionar que antes de la fiebre por los hechizos del joven Potter, había sido “Sabrina, la bruja adolescente” la que se había popularizado como serie televisiva, con el protagónico de Melissa Joan Hart en el papel de esa chica de 16 años que descubre sus capacidades para obrar la magia. Los episodios de esta tira se extendieron entre 1996 y 2003, inspirados libremente en un comic que data de 1962, e incluyeron la participación en carácter de invitados de estrellas de la canción como Britney Spears, Avril Lavigne, los Backstreet Boys, y N’ Sync, entre otros.
La manera en que Disney se plegó a esta tendencia fue a través de la serie “Los hechiceros de Waverly Place”, que comenzó a emitirse en 2007 y que a lo largo de cuatro temporadas siguió las andanzas de los tres hermanos Russo (Justin, Alex y Max), quienes heredan de su familia las aptitudes para realizar encantamientos y se empeñan en conservar el secreto sobre tales dones. El programa sirvió, entre otras cosas, para cimentar el lanzamiento como figura musical de Selena Gomez, quien desde su rol de Alex brilló con luz propia y reclutó una legión de seguidores.
En el contexto de otros tanques de audiencia de Disney en ese entonces, como “Hannah Montana”, “Zack & Codie” y “Lizzie McGuire”, la serie de los niños magos representó un éxito resonante para la compañía y dio lugar a la elaboración de una película para TV, “Wizards of Waverly Place: The Movie”, que se estrenó en 2009. En enero de 2012, Disney Channel consideró que “Los hechiceros de Waverly Place” ya no tenía mucho más para entregar y se resolvió discontinuar su emisión, tal vez porque la popularidad de Selena Gomez superaba la del mismo programa donde ella había obtenido el reconocimiento masivo.
Ha transcurrido más de una década desde ese punto final y mucho ha sido lo que ha sucedido con la carrera de aquella pequeña actriz que luego devino en cantante pop, rubro dentro del que obtuvo mayor suceso aún, con resonantes hits que instalaron su nombre entre las divas de la canción internacional. Sin embargo, problemas graves de salud y un alto grado de inestabilidad en su temperamento la obligaron a poner entre paréntesis su actividad artística, para recién en 2020 retomar la prosecución de su producción discográfica después de un prolongado hiato de cinco años.
La novedad es que ahora, desde el pedestal de celebridad en que se encuentra, ella ha resuelto producir la continuidad de “Los hechiceros de Waverly Place” a instancias de una propuesta de Disney, que también la ha invitado a actuar en esta extensión de la historia. Con fecha de debut prevista para mañana, “Los hechiceros más allá de Waverly Place” marca un giro en la estrategia de esta empresa especialista en contenidos infantiles, que aquí parece dispuesta a recuperar a quienes asistieron en tiempo real a la emisión de la tira y que ahora, a los veintipico, quizás sientan curiosidad por ver en qué andan aquellos personajes.
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