El presidente del bloque de legisladores consideró que el 5 mayo es una fecha inapropiada para la elección de autoridades partidarias. Motivos: Río Cuarto y la crisis.
26 de febrero de 2024
Alejandro Moreno
“No podemos estar pensando en una interna”, remarcó ayer el presidente del bloque de legisladores de la UCR, Matías Gvozdenovich, sumando así su voz a la de los que quieren postergar las elecciones del 5 de mayo.
El posible cambio de fechas de las elecciones internas del radicalismo cordobés -que a su vez implica una nueva prórroga de los mandatos de las actuales autoridades, que concluyen el 31 de mayo- será discutido hoy en la reunión que sostendrán los miembros del Comité Central y los presidentes o referentes de los núcleos internos.
Las opiniones están divididas, por lo que el destino de las elecciones internas es incierto, y la consulta a los referentes partidarios busca un amplio consenso para cualquier decisión que vaya a tomarse.
Los radicales del interior empujan para que las internas no sean el 5 de mayo, sino más tarde. Primero lo planteó la UCR de Río Cuarto porque en esa ciudad habrá elecciones municipales y una lucha intestina en el partido podría disminuir las chances de Gonzalo Parodi, su candidato. En el sur creen que Parodi puede ganar frente a un peronismo algo debilitado, y siempre que los radicales no sufran también una división.
El intendente, el peronista Juan Manuel Llamosas, no ha fijado todavía el calendario electoral, pero su segundo mandato termina el 2 de julio, por lo que inevitablemente coincidirían las campañas municipales con las internas de la UCR. Claro que podría suceder que haya un acuerdo en el radicalismo para formar una lista común, pero por ahora esa es una hipótesis lejana, y aunque se llegara a tal milagrosa solución sería tras una guerra de nervios que dejaría ganadores y perdedores.
Gvozdenovich sostuvo que “primero nosotros tenemos que concentrar todo el radicalismo en Río Cuarto, para apoyar fuertemente al candidato Gonzalo Parodi. Es fundamental. Incluso van a ir dirigentes de Juntos por el Cambio a respaldarlo”.
“Por eso necesitamos que la elección pase para el segundo semestre, por las elecciones de Río Cuarto, que es la Capital Alterna de la provincia de Córdoba”, dijo a Alfil.
Pero, agregó, “también porque hoy no están las condiciones dadas por la problemática nacional”. Para Gvozdenovich, en este momento “los dirigentes y los intendentes debemos estar con la gente”. “Veo que hay mayores que se meten con los chicos dentro de los containers de la basura”, observó.
El presidente del bloque de la UCR en la Legislatura insistió: “No podemos estar pensando en una interna hasta que por lo menos haya un panorama nacional claro”.
“En el interior nadie quiere internas, no están en la batalla esta del ego de Capital, sí queremos la unidad como hemos hecho en el foro”, señaló en relación al Ente de Intendentes de la UCR. “Es imprescindible la unidad para reconstruir al partido”, manifestó el ex intendente de Arias.
De todas maneras, Gvozdenovich opinó sobre quién debería ser el próximo presidente del Comité Central: confesó que le “gustaría” si el candidato de la alianza interna de deloredistas y afines es Marcos Ferrer, el intendente de Río Tercero.
“Porque viene del municipalismo y de tener construcción política”, explicó. Y aseguró que los radicales del interior tienen más vocación por el trabajo en equipo, a diferencia de los capitalinos, que protagonizan “mucha pelea”.
“Marcos –continuó- puede tener más independencia de los referentes de la ciudad de Córdoba, a diferencia de otros que han llegado a presidentes del Comité Central”. El actual presidente, Marcos Carasso, alcanzó el cargo mientras se desempeñaba como intendente de General Cabrera y fue colocado en esa silla por Mario Negri.
Obdulio Varela
Gvozdenovich citó al que fuera el capitán de la selección de fútbol de Uruguay en el Mundial 1950, Obdulio Varela, quien animó a sus compañeros, antes del partido final contra Brasil en el Maracaná con la frase “los de afuera son de palo”.
En defensa de la “autonomía provincial” del radicalismo, Gvozdenovich protestó contra los dirigentes cordobeses que buscan el respaldo de foráneos, como los gobernadores Gustavo Valdés (Corrientes) y Alfredo Cornejo (Mendoza), o el presidente del Comité Nacional, Martín Lousteau, o el porteño Emiliano Yacobitti.
“Lo que necesitamos nosotros es laburar y darle espacio a los jóvenes y a los intendentes que tienen el poder territorial, a la gran cantidad de legisladores que tenemos y aprovechar los dirigentes con experiencia”, dijo.
“Córdoba siempre fue el faro del radicalismo nacional, y si está apagado hay que prenderlo para liderar un proceso nacional”, concluyó.
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