El acuerdo cordobés le allanó a Negri el sillón de la AGN

Por Bettina Marengo

El exdiputado nacional Mario Negri fue elegido por el bloque de la UCR en Diputados que conduce el también cordobés Rodrigo De Loredo para integrar la Auditoría General de la Nación (AGN) en una decisión que ya estaba resuelta a su favor desde hace un mes. La elección se realizó el martes por la noche en el seno de la bancada donde conviven heterogenias políticas, en una reunión donde también se habló de los proyectos de baja de la edad de imputabilidad a los menores que impulsa La Libertad Avanza. En el camino para la AGN quedó la apuesta del gobernador mendocino Alfredo Cornejo, cuya candidata era la diputada Pamela Verasay, y al que alguna vez impulsó De Loredo, cuyo candidato era el exdiputado y actual secretario parlamentario del bloque Alejandro Cacace. En el caso del presidente del bloque, aunque el negrismo desliza que jugó en contra de Negri todo lo que pudo, primó el acuerdo en Córdoba con Morena, el núcleo de exdiputado, para armar Generación X, la alianza que busca poner como jefe de la UCR Córdoba al intendente de Río Tercero, Marcos Ferrer. Negri tenía los votos para ser auditor y el camino se allanó. El tema se llevará al recinto en la sesión del miércoles 7 de agosto. La foto de la paz entre los dos cordobeses que convivieron entre 2021 y 2023 como sendos jefes de bloques escindidos en Diputados, es explícita.

La AGN es un organismo nacional que controla externamente al Estado en sus gastos y cuyo directorio está integrado por siete miembros, de los cuales 3 son diputados y 3 senadores, con cargos de ocho años. De modo que, con este aval, el ex vice de Eduardo Angeloz se asegura, tras algunos meses de llano, un buen pasar político por casi una década.

La decisión obviamente no estuvo exenta de rosca radical. Los detractores de Negri enrostraron que tuvo el apoyo directo de Martin Lousteau, y recordaron que De Loredo rompió el bloque a fines de 2021 para armar uno de la UCR-Evolución de la mano del senador y de Emiliano Yacobitti. Esto se dio luego de que Negri perdiera las primarias en Córdoba frente a la lista de Luis Juez y De Loredo. Pero lo cierto es que el tiempo y el factor Javier Milei  hicieron que De Loredo tomara distancia de los “evolucionados”. Ese dato es el que toman algunos radicales para explicar el apoyo de Lousteau al padre de Juan Negri, en una suerte de movimiento parabólico del encono. De nuevo, tal vez los acuerdos de Córdoba expliquen los apoyos: Ferrer es dirigente del entorno de Yacobitti, y es el candidato de De Loredo, de Negri y, obvio, de Lousteau para presidir la UCR Córdoba.

Nombres como Carla Carrizo y Dania Tavella, Mariela Coletta, quienes continúan cerca del marido de Carla Peterson, acompañaron la posición de Negri. Anteanoche circuló un documento para sus firmas, junto a las de Karina Banfi, Marcela Antola, Melina Giorgi, Fabio Quetglas, Pedro Galimberti, Pablo Juliano, Julio Cobos, Facundo Manes, Jorge Rizzotti, Marcela Coli, Gerardo Cipolini, Natalia Sarapura, Mario Barletta, Fernando Carbajal, Roxana Reyes, Juan Carlos Polini, Atilio Benedetti Roberto Sánchez y Manuel Aguirre. En ese documento no está la firma de De Loredo, ni de sus comprovincianos Gabriela Brower de Koning, Soledad Carrizo y Luis Picat.

Fuera de este esquema y más cerca de Martín Menem, el presidente libertario de la Cámara de Diputados, Picat no apoya a Negri y en su círculo lo expresan sin empacho. Dicen que el motivo de su posición es que pretende una “renovación institucional y de personas” para los cargos que ocupe el radicalismo, y además deslizaron preocupación porque “no se trata de un lugar de la UCR y habrá que ver cómo se resuelve”. Es que el radicalismo accedió a ese puesto en la AGN luego de la que LLA decidiera no pelear por el suyo. La advertencia viene de un dirigente cercano a los libertarios como es Picat, que aguarda fecha para una bajada de Menem a Córdoba, lo que enciende las alertas de algunos sobre una eventual complicación en la designación de Negri.