Convivencia de pasado y futuro
El grupo Los Monkys, que desde hace más de una década transita los escenarios cordobeses con su propuesta rockera y que ha hecho de su pertenencia al barrio San Vicente una marca registrada, lanza el próximo jueves a través de YouTube su nuevo disco, titulado “Alto viaje”.
Por J.C. Maraddón
Hace algún tiempo, en ocasión del estreno de una nueva versión de la obra teatral “San Vicente Super Star”, destacamos la fuerte identidad que posee esa barriada del sudeste de la capital provincial, que no en vano porta el apodo de “república” debido a sus ínfulas independentistas. Decíamos en aquel momento que se trataba de una zona que conserva muchas de las características de antaño, a diferencia de Nueva Córdoba, General Paz o Alta Córdoba, que con mayor o menor pérdida patrimonial han sucumbido en la batalla contra el desarrollismo inmobiliario que ama los edificios en torre y detesta esas viejas casonas señoriales.
Y si San Vicente ha podido mantener algunos de los elementos que le son propios desde principios del siglo pasado, en gran parte es porque no se resigna a olvidar ciertas costumbres vecinales como las charlas al paso en la vereda o el poder del chimento como disparador de esas noticias que no salen en los diarios. Aún en tiempos de inseguridad creciente y de adicción a las redes sociales como refugio para no pensar, aquel perímetro urbano no abandona ese encanto que algunos considerarán demodé pero que otros valorarán como el resabio de una época que ha pasado al olvido.
Es factible entonces creer que un entorno tan particular debe funcionar como fermento para que surjan de allí expresiones culturales poco comunes, tal vez menos contaminadas por la sed vanguardista que lleva a referenciarse en las tendencias más novedosas provenientes del hemisferio norte. O suponer que si esas modas foráneas aterrizan en sus calles, serán adaptadas all’uso nostro por quienes, conscientes de habitar un espacio sin parangón, no dejarán de imprimirle un toque distinto y propio a eso que ha sido creado en un lugar donde se habla otro idioma, donde se guardan otras formas y donde se comparten otros valores.
El rock, que en los últimos setenta años ha mutado sin parar a partir de entremezclarse con otros géneros y otras geografías, debería entonces ofrecer el ejemplo más cabal de este tipo de apropiación, porque no es natural del paisaje sanvincentino y por ende no debe ser lo mismo interpretarlo allí que hacerlo en Los Angeles o Manchester. Y más allá del parecido que pueda existir en ciertos patrones básicos de los que militan ese estilo en cualquier parte del mundo, seguramente quienes lo hagan en San Vicente expondrán particularidades que no son comunes a las del resto.
El grupo Los Monkys, que desde hace más de una década transita los escenarios cordobeses con su propuesta rockera, ha hecho de su pertenencia a ese barrio una marca registrada. Y desde de esa fortaleza, se ha lanzado a desandar caminos a través de una propuesta que enlaza la tradición del rock británico con la psicodelia y el beat, hasta completar un proyecto artístico que posee una personalidad indiscutible. El próximo jueves, la banda lanza en YouTube su nuevo disco, “Alto viaje”, que es presentado en videos surgidos de la imaginación y el trabajo de su guitarrista, Manuel Manso.
Con cambios en su formación pero no en su esencia, Los Monkys siguen apostando al rock, como parte de la resistencia de una corriente sonora que se debate en una profunda crisis después de tantas décadas de predominio. Desde San Vicente y con seis nuevas canciones, que incluyen un cover de un clásico del “Potro” Rodrigo, ellos contribuyen a insuflarle aire a un género que está siendo ahogado por otras variantes musicales. Y, en simultáneo, practican una defensa del imaginario barrial que no se entrega al furor modernista y que vibra en una clave donde el pasado y el futuro pueden convivir.
Te puede interesar
Una canción de redención
El próximo sábado, Pity Álvarez se presentará como solista en el Estadio Mario Alberto Kempes en su concierto de retorno, un operativo del que ya se conoció el tema “No sé cuánto”, que formará parte de su álbum “Basado en hechos irreales”. Cabe esperar que su reencuentro con los fans cierre una etapa oscura de su biografía.
Caras y caretas cordobesas
Lugones era entrevistado en 1912 en la capital británica por un corresponsal del semanario, a quien refería el proyecto literario en el que se hallaba empeñado: el estudio del Martín Fierro, y también describía su rutina londinense. Al año siguiente, estaba de vuelta en el país.
No se consigue así nomás
A regañadientes, los detractores del cuarteto han debido aceptar el actual estatus del género, pero no se privan de hacer escuchar sus quejas cuando se les presenta la oportunidad, como ha ocurrido en estos días con su declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO.
Tan populares como indefendibles
Para traducir aquellos personajes a los tiempos que corren, mucho deberán trabajar los responsables de llevar a una producción audiovisual de ficción las aventuras de Alberto Olmedo y Jorge Porcel, un proyecto que trascendió en redes sociales y del que todavía no se sabe si será una película o una serie.
Intimidades de una diva nacional
Más allá del material de archivo que rescata sus proezas infantiles en el inicio del camino hacia la consagración, lo que vemos en el documental “LALI: La que le gana al tiempo”, estrenado la semana pasada por Netflix, es la evolución del “Disciplina Tour”, desde las dos funciones en el Luna Park hasta llenar el estadio de Vélez.
Llaryora y Passerini celebran: el Cuarteto declarado Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO
El Gobernador e Intendente manifestaron en sus redes alegría ante la distinción de la organización internacional. Se trata de un reconocimiento institucional que subraya su relevancia cultural y fue anunciado y celebrado por autoridades provinciales.