Prepagas: en cuatro meses aumentaron lo que llevó 19 entre 2016 y 2018

Los argentinos observan el debate entre el ministro de Economía Luis Caputo que dijo que las prepagas le “declararon la guerra a la clase media” por sus subas y generó la respuesta del sector acerca de que la cuota “no genera inflación, recupera un gasto ya realizado tanto en el financiador como el prestador”. Un informe privado señala que el “significativo aumento real” que de las compañías en los últimos cuatro meses, “en el período 2016-2018 llevó 19 meses”.

El Iaraf que dirige Nadín Argañaraz realizó un reporte en el que trabaja con un único plan de salud en el período bajo análisis. Como medida del salario promedio se utiliza el Ripte, es decir, la remuneración promedio de trabajadores en relación de dependencia que publica la Secretaria de Trabajo. Como índice de precios promedio emplea el índice de precios de Ucema desde el mes de enero de 2013 hasta noviembre de 2016 y el Indec desde entonces hasta febrero último.

Lo primero que resulta necesario evaluar es la evolución del valor nominal del servicio de salud. Al comienzo del periodo, en enero del 2013, el valor del servicio era de $806, mientras que este mes alcanza los $227.000. Es decir, experimentó un incremento nominal del 28.105% entre puntas.

Si se toman todas  las otras variables, respecto a enero de 2013, la que mayor incremento tuvo fue el plan de salud prepago, con un incremento del 28.105%, seguido por el IPC con un incremento del 17.866% y por el salario promedio con un aumento del 10.523%. Esto quiere decir que el valor relativo del servicio de salud respecto al índice general de precios se incrementó, y que también lo hizo, pero en mayor medida, respecto al valor del salario formal promedio del trabajador en relación de dependencia.

Analizada la diferencia nominal, también están las evoluciones de los valores reales. En el caso de la prepaga hay varias etapas: la primera va entre 2013 y 2016, en la cual se dio un proceso de estabilidad, con una leve tendencia a la baja. Luego, entre 2016 y 2018 se dio un proceso de incremento sostenido del valor, del 61%. En la tercera etapa, entre 2018 y fines de 2023, hubo una estabilidad del precio, pero por encima del que tuvo en la primera etapa, con un fuerte descenso en los últimos meses del periodo. Por último, en la cuarta etapa, la más reciente, el valor real de la cobertura experimentó un incremento muy significativo en muy poco tiempo, llegando en la actualidad al valor máximo de la serie, de $227.000.

Del análisis realizado surge un comportamiento particular de los períodos 2016-2018 y el actual. En marzo de 2016 el valor real del plan de la prepaga era de $139.600 y experimentó un incremento sostenido de 19 meses hasta el valor de $224.800, es decir que subió un 61% en 19 meses.

En la actualidad el valor del plan era de $143.000 en el mes de diciembre y subió un 59%, llegando a $227.000 en abril. Es decir que en tan solo cuatro meses subió un 59%, aproximadamente. De ambos comportamientos, surge que la recomposición relativa actual se está haciendo en un quinto de tiempo del que se hizo en el periodo 2016-2018.

Respecto de la relación entre el salario promedio y el valor de la cobertura de salud, se ve en las series que el salario perdió el 62% de su capacidad de compra sobre el pago del plan en el período bajo análisis. Se destaca el rápido descenso experimentado entre octubre de 2023 y abril del 2024, del orden del 32%.

Es decir que prácticamente la mitad de la pérdida de poder adquisitivo se daría en solamente seis meses, de un periodo de 12 años. En la actualidad, esta relación se encuentra en su punto mínimo dentro de todo el periodo.

Otra manera de analizar la relación entre medicina prepaga y salario es calcular la proporción del gasto en medicina prepaga dentro de un sueldo formal promedio: en el 2013 ese gasto insumía el 11% del salario formal promedio. En el periodo que va desde 2013 hasta el 2019, la incidencia aumentó a un promedio del orden del 19%. Este mes, en el mejor de los casos, trepa al 30%.