Si gana Parodi, la UCR tendrá el control de la capital alterna y el PJ quedará raspado, pero también puede haber consecuencias puertas adentro del centenario partido. Ferrer no será el intendente con el mayor territorio, Prunotto perdería un aliado como Juan Jure, Evolución tendrá otro referente con peso en Córdoba y todos apuntarán a la disputa en la Capital.
Provincial 11 de junio de 2024
Gabriel Silva
Por Gabriel Silva
Por esas paradojas que persiguen al radicalismo cordobés en el último tiempo, la fecha para definir las alianzas de cara a la interna del 8 de septiembre vence el próximo 20 de julio, el Día del Amigo. Y diez días más tarde caduca el tiempo para presentar candidaturas frente a una disputa de la que nadie en la UCR quiere hablar, aunque todos observan con incomodidad.
Fundamentalmente, porque antes de la interna de septiembre; o en realidad, como causante de la postergación de esa disputa asoma en casi diez días la elección de la intendencia en Río Cuarto. Y aquello que se convirtió en la excusa perfecta para procrastinar el destino del radicalismo mediterráneo, hoy se transforma en el “efecto mariposa’ que puede modificar para -casi- todos, el futuro inmediato dentro del partido.
Como se sabe, en el Imperio del Sur habrá escenario de tercios con dos peronistas enfrentados, como el oficialista Guillermo De Rivas y Adriana Nazario; y por el medio de la insalvable grieta PJ se acomodó Gonzalo ‘el Pampa’ Parodi. El hombre de Evolución que puede convertirse en el radical con mayor territorio dentro de la provincia en su poder, en caso de destronar al llamosismo en el sur provincial.
Motivo por el cual, no son pocos los que miran con atención el desenlace de los comicios riocuartenses en lo que podría ser un revival de la UCR y un fuerte golpe para los renovadores del PJ cordobesista. En la primera elección del gobernador Martín Llaryora como líder de esta nueva era del PJ y como socio mayoritario del Partido Cordobés.
El impacto en la interna
Hasta el momento, nadie con racionalidad y radicalismo en sangre asegura que haya una interna en el plano provincial en septiembre. La gran mayoría sostiene el consenso como herramienta para destrabar acuerdos y no hacer papelones en una elección partidaria con este contexto de crisis y la gente alejada de la política.
No obstante, para llegar a esos acuerdos aún hay cabos sueltos. Por ejemplo, el intendente de Río Tercero, Marcos Ferrer, asoma como el garante del consenso para un sector, aunque todavía debe ver si para otras porciones de la UCR “pasa”. Como se dice en la jerga.
A saber, el diálogo y la venia por parte de Rodrigo de Loredo existe; pero su rol como intendente, como la relación de cualquier alcalde con El Panal, debe pasar el escáner del resto. Que, además, ponen la lupa en cuánto le conviene al riotercerense tener sombra en Río Cuarto.
Análisis que desestiman de inmediato en Río Tercero. “Marcos laburó y quiere que se gane. Cerró los acuerdos macro con (Gabriel) Abrile, está jugando fuerte a que se gane, sumó terminales y encuestas desde Buenos Aires, es una estupidez que se crea que no va a ganador en Río Cuarto”, razonaron cerca de Ferrer.
“Aparte, Marcos es candidato en la interna porque se lo pidió Rodrigo”, agregaron.
Por ahora, Ferrer suma el aval de De Loredo, habla con Ramón Mestre, interactúa con los legisladores provinciales, tiene diálogo con los intendentes y cuenta con terminales nacionales como Martín Lousteau. Hoy, esto último luce más como una desventaja según creen los detractores de Ferrer.
Sobre todo, por la rivalidad creciente entre el presidente del Comité Nacional y el socio en Córdoba de De Loredo, el senador Luis Juez.
Carrizo, camina
Otra de las que pelea en el puzzle es la diputada Soledad Carrizo. Referente del gobernador mendocino Alfredo Cornejo acentuó -curiosamente- sus recorridas en la capital provincial, en su entorno sostienen que no ha sido convocada a ninguna mesa para llegar al consenso y sigue armando.
El viernes estuvo en un recorrida acompañada por algunos radicales que respaldan la gestión de Milei, y es ahí donde repercute con fuerza la faz discursiva de la interna radical en Córdoba; entre los que apoyan la gestión libertaria y aquellos que la critican.
Cerca de Carrizo también creen que Río Cuarto puede tener impacto en la interna, aunque nadie asegura que esto reacomode todas las fichas del tablero. Y no hay que descartar que las recorridas capitalinas estén vinculadas con el futuro más lejano: la sucesión de Passerini en la ciudad. “Tiene domicilio en Córdoba”, advirtió una fuente.
Por lo que podría sumarse a la carrera de los no PJ con Myrian Prunotto y Javier Pretto, aunque estos dos como anclaje de una reelección de Llaryora, y la diputada dentro de un armado con De Loredo candidato provincial.
Decisión Capital
Así como en la provincia están más cerca del consenso, los radicales de la Ciudad están convencidos de que la capital cordobesa será escenario de batalla. “Capital, Colón y Punilla van a tener interna asegurada”, dijo una persona de diálogo con Prunotto.
De hecho, en Colón la vicegobernadora se reunió en las últimas horas con dos exintendentes de Colonia Caroya y hay optimismo en esa parte del norte.
En tanto, en la Ciudad, para los que vienen por dentro del armado deloredista, Javier Bee Sellares podría acomodar sus jugadores si él asegura una delegación nacional y, tal vez, la Juventud. Objetivo del que está detrás el gobernador correntino Gustavo Valdés, quien necesita a Bee Sellares en el Litoral hasta la elección provincial del año próximo.
Hubo un intento con Lucas Balián para que fuera el beesellarista por la capital, pero en los últimos días de la semana pasada perdió fuerza después de una serie de conversaciones.
Cerca de Ferrer creen poder cerrar este territorio en un acuerdo con el mestrismo para evitar las tensiones en todos lados. Resta ver algo clave: qué piensa De Loredo.
“Si le reconocen a Confluencia el territorio, puede haber acuerdo”, dijo un mestrista puro.
¿Y Prunotto?
Detrás de Parodi, entre varios, está el exintendente y exlegislador Juan Jure. En algún momento se creyó que ‘el Turco’ podía ser la llave provincial de la vicegobernadora en la interna, pero si la UCR gana en el Imperio el escenario cambia y los planes también.
“Él nunca se sentó a hablar con Prunotto, pero nos dijo que está esperando que pase Río Cuarto y no dejó su objetivo provincial de lado”, dijo un radical de línea directa con la titular de la Unicameral. Donde sí seguirán la pelea es en la capital.
Para muchos, la sensación que queda es que, de acá hasta el Día del Amigo, la rosca va a estar en pleno funcionamiento. Sobre todo, porque después de septiembre arranca el 2025.
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