Llamosas aceptó derrota táctica, pero negó plebiscito a su gestión

El lunes post electoral de Juan Manuel Llamosas comenzó entre mucho análisis y pedidos de autocrítica por los resultados en la ciudad. El ahora legislador electo celebró en lo provincial, pero demostró preocupación por la derrota que Hacemos Unidos por Córdoba sufrió en manos de Juntos por el Cambio en el ámbito local -aun cuando el intendente peronista criticó a la alianza en campaña por no poner a dirigentes de la ciudad en puestos expectables. La estrategia con la que buscó ponderar a su gestión como intendente no funcionó y así lo reconoció, aclarando que la derrota no significó la desaprobación popular de su gestión en la ciudad. 

“Siempre tenemos la expectativa de ganar, pero sabíamos que no iba a ser una elección sencilla. Claramente no se pudo conseguir el objetivo y tuvimos una elección muy reñida, como ocurrió en muchas ciudades del interior”, explicó Llamosas en el primer análisis post electoral, el cual comunicó a la prensa ayer al mediodía en su despacho dentro de la Municipalidad de Río Cuarto. Visiblemente cansado, por no haber dormido tras el raid de un domingo que lo tuvo esperando los festejos en la capital. Aunque también claramente tocado por la performance de su lista en un distrito que pretendía asegurar para despejar toda duda sobre su valor dentro del proyecto.

En esa primera apreciación pública de la derrota por cinco puntos contra la lista de JpC, también se vio a un Llamosas lúcido respecto a lo que deberá ocurrir inmediatamente después de esta elección. A priori, el intendente -que volvió al cargo ayer tras tomarse licencia por la campaña- aseguró que “habrá que hacer la autocrítica correspondiente” y poniendo en evidencia que el proyecto que apuntaló en la capital alterna no había logrado interpretar de la mejor manera los deseos y motivaciones de una parte de la sociedad riocuartense. De hecho, el llamosismo tenía la expectativa de achicar distancias en el centro, donde finalmente cayeron por 13 puntos. 

 
Pese al pedido de análisis interno de fallas, el intendente reiteró en más de una vez que el resultado no ha sido un reflejo de la relación entre su Gobierno y el electorado riocuartense, sino más bien de una agenda política y social más amplia que excede lo local. “No se ha plebiscitado la gestión”, afirmó Llamosas, aunque aclarando que deberán analizar el mensajde que les dio la población a través de las urnas.

En ese sentido, la explicación que esbozó el intendente tenía que ver con la nacionalización de la elección provincial, algo que -opinó- también se había reflejado en otras localidades de la provincia. Con esto, Llamosas también reconoció que sus rivales fueron más efectivos en lo táctico. “Nuestra estrategia fue ponderar lo hecho por nuestra gestión, mientras que nuestros rivales buscaron nacionalizar las urnas. Evidentemente pesó más lo que buscaron ellos, porque se repitió en casi todos los municipios que perdimos”, dijo.

Más allá de que desconoció el resultado como un plebiscito negativo contra su gestión, Llamosas lanzó un mensaje contundente a su equipo y llamó a “profundizar” la estrategia política de su gestión en la ciudad. Hasta dejó la puerta abierta hacia la toma de decisiones que impliquen cambios en su forma de gestionar la ciudad. ¿Quizá nuevos nombres en el gabinete? Aunque el intendente no lo confirmó, su semblante y el tenor de sus respuestas hacen pensar en una advertencia encubierta a quienes lo militan a nivel local, pensando en lo que vendrá hacia adelante, la elecciones del 2024 en Río Cuarto, donde HUpC y el gobernador electo Martín Llaryora tendrán su primera gran prueba electoral.

Justamente, Llamosas también se refirió al 2024 y reconfirmó la puesta en marcha de la campaña municipal, aun sin un nombre definido para la candidatura oficialista. “Habíamos dicho que, una vez terminada la campaña provincial, estaríamos trabajando la mejor estrategia para darle continuidad a lo que entendemos es una gestión con un alto nivel de aprobación y que ha logrado transformar la ciudad”, adelantó el jefe del PJ local, quien ya parece metido de lleno en la búsqueda del sucesor.

Llamosas casi se olvida de las elecciones nacionales, pero también dejó en claro que en estos meses se estará trabajando en la campaña presidencial de Juan Schiaretti. Claro que, reconocen desde dentro del llamosismo, los resultados del domingo pasado en la ciudad le meten presión al intendente y su esperada definición del candidato a intendente del PJ local. Tal como lo viene adelantando Alfil, eso llegará en el corto plazo y luego de discutirlo con el gobernador electo. No habrá interna y por estos días comenzarían a llegar los primeros “lanzamientos” para zanjar la veracidad de las encuestas. ¿Agustín Calleri o Adriana Nazario? Todavía ninguno.

Ascenso

En otro de los fragmentos de su encuentro post electoral con la prensa, Llaryora afirmó que el 10 de diciembre estará asumiendo en su banca de la Legislatura, “el cargo con el que me honraron los cordobeses”. Por un lado, estas declaraciones confirmarían -a priori- que Llamosas dejará la intendencia de meses antes de terminar su segundo y último mandato. Pero también dejó pistas de algo que podría confirmarse en el corto plazo y que lo tendría en un lugar de trascendencia dentro del nuevo equipo de gestión provincial.

“En estos días me estaré reuniendo con el gobernador electo para ponerme a disposición para tomar las decisiones que crea convenientes en función de la estrategia de su gestión”, relató el jefe municipal de la capital alterna, sugiriendo un potencial paso al futuro gabinete provincial.

Renovación

Las declaraciones del intendente riocuartense también incluyeron frases y críticas que fueron en sintonía con lo expresado por Martín Llaryora al momento de declararse ganador de la elección provincial. 

En primer lugar, se mostró descontento con el retraso en la llegada de los resultados. “Lamentablemente no pudimos festejar el triunfo como se debía. Haber tenido en vilo a la población no estuvo bien y nos generó tristeza”, declaró Llamosas.

También puso en duda la efectividad del diseño de la boleta única, puesto que -en el interior de su equipo- observaron la importante diferencia de votos entre la elección de gobernador y la de legislador departamental.

Sobre todos los puntos “negativos” abordados por Llamosas en el análisis de esta elección, otra de las coincidencias con el discurso del gobernador electo tuvo que ver con resaltar el “traspaso generacional” que llegará en diciembre, revelando que las tensiones con “la vieja guardia” tienen un correlato riocuartense.