La "unidad en la acción" del movimiento obrero cordobés y las organizaciones sociales volverá a cargar contra Milei el 25-M. Lejos de recular, el Gobierno Nacional prepara un proyecto para redoblar la apuesta poniendo fin a las “cuotas solidarias" que cobran los sindicatos y castigando el bloqueo a empresas como medida de fuerza.
Provincial 13 de mayo de 2024
Redacción Alfil
Por Felipe Osman
El Gobierno Nacional prepara un proyecto para reponer algunos artículos de la Reforma Laboral que quedaron fuera del dictamen que la semana pasada salió de Diputados con rumbo al Senado, y la decisión tiene una explicación sencilla. En Casa Rosada entienden que el gremialismo traicionó un acuerdo tácito.
El oficialismo resalta que atendió todos los reclamos que, por intermedio de los bloques dialoguistas, los sindicatos opusieron a los primeros borradores de la reforma. Entre otras concesiones, se retiró la eliminación de las cuotas solidarias, un artículo que penalizaba el bloqueo a empresas con “6 meses a tres años de prisión” y otro que habilitaba el despido del trabajador que participara de un bloqueo, y la declaración de la educación con servicio público esencial (limitando la capacidad de protesta), pero aún así la CGT decidió sostener el paro, lo que enfureció al Gobierno.
Parte de la respuesta llegó el mismísimo jueves, cuando los libertarios sacaron a relucir toda su capacidad de fuego en las redes sociales, buscando enfrentar al ciudadano promedio con los dirigentes gremiales. Pero ese fue solo un capítulo de la “Batalla Cultural”. Las hostilidades seguirán, y probablemente se hagan cada vez más profundas, porque Milei ahora tocaría puntos muy sensibles, poniendo otra vez sobre la mesa la eliminación de: las “cuotas solidarias” y una nueva “ley de bloqueos”.
Las cuotas solidarias son un mecanismo de financiamiento clave para los sindicatos, son detraídas de las remuneraciones de los trabajadores incluso en el caso de que no estén agremiados, y están justificadas en la representación legal que los sindicatos hacen de ellos al momento de negociar paritarias.
En un primer momento, la eliminación de las cuotas solidarias no estaba en los planes del Gobierno Nacional. Tanto, que ni siquiera el DNU 70 la contemplaba. Con su capítulo laboral congelado por efecto de una cautelar judicial, el oficialismo decidió incorporar la reforma en el texto de la Ley Bases, y fue la UCR la que propuso la eliminación de las cuotas solidarias. El Gobierno cedió ante el lobby de la CGT para que el artículo fuera retirado, pero después de que la central mantuviera la medida de fuerza del jueves pasado, Javier Milei habría cambiado de parecer.
Además, los libertarios irán ahora por la reposición de la penalización a los bloqueos como medidas de fuerza gremiales.
El Gobierno Nacional diseña esta contraofensiva por distintos motivos. El primero es que ve en las conducciones sindicales actores sumamente deslegitimados en el debate político, que ningún espacio político -fuera del kirchnerismo- saldrá a defender. Pero además porque ve en la confrontación directa con los sindicatos la posibilidad de capitalizarse frente al electorado.
Todas estas elucubraciones se dan en la previa de un 25 de mayo que luce cada vez más desinflado, sin Tedeum, con varios gobernadores que rechazan la convocatoria y una visita presidencial que durará solo dos horas. Apenas una foto, aunque aún importante para Milei, que necesita enviar esa postal al FMI, demostrando alguna capacidad de construir consensos en el sistema.
El problema, entonces, será el contexto. El gremialismo prepara una nueva movilización para el 25. Las dos CGT cordobesas, ambas CTA y la Utep, junto a las demás organizaciones sociales renovarán su reclamo en contra de las políticas del Gobierno Nacional, en general, y en contra de la reforma laboral en particular.
Llaryora, como anfitrión de ese deslucido Pacto de Mayo, está atento a lo que el gremialismo planea hacer. Y, esta vez, puede que hasta las 62 Organizaciones Peronistas terminen plegándose. Lo decidirán este martes. Pero parece difícil que puedan evitar plantarse. Marcelo Díaz, su secretario general, es también el líder del Sindicato de Correos. Y el principal empleador, el Correo Argentino, está en la lista de empresas a privatizar por el libertario.
Tras una nueva reunión con la conducción provincial del gremio, el Centro Cívico pospuso para mañana la nueva oferta a los docentes, que analizarán la propuesta la semana próxima. La aceptación o el rechazo llegarán cuando se haya agotado la conciliación.
Tras siete meses, se designó a un nombre de LLA al frente de ANSES. La abogada Silvina Drovandi asumió como directora de la delegación local. Es la segunda dependencia que suma un nombre libertario. Resta blanquear quién será el titular de la Agencia Territorial de Empleo.
Aunque fue el segundo encuentro ordinario del periodo, la de ayer se sintió como la primera con la aprobación de las comisiones y la designación de cargos pendientes. La primera minoría (Primero Río Cuarto) ya tiene prosecretario y propuso representante en el EMOS.
La primera sesión legislativa del segundo semestre se vio atravesada por una discusión inédita que nadie vio venir. La crisis que atraviesa el multimedio de los SRT terminó siendo el chivo expiatorio de la “politiquería” en la Unicameral.
